El Instituto Nacional Tyndall y el Centro de Circuitos Microelectrónicos de Irlanda (MCCI), ambos en Cork (Irlanda), han puesto en marcha un innovador proyecto que transformará la navegación quirúrgica en el futuro. Los investigadores consideran un hito importante el desarrollo del primer sensor en un chip para el seguimiento magnético en cirugía y otros procedimientos guiados por imágenes.
Este avance acelera la transición de la dependencia de las dañinas imágenes de rayos X a un enfoque más seguro y preciso para la navegación de instrumentos médicos en el cuerpo. En la cirugía tradicional guiada por imágenes, se suelen utilizar rayos X para guiar los instrumentos. Sin embargo, una nueva tecnología conocida como "seguimiento magnético" está revolucionando la práctica clínica al minimizar la dependencia de los rayos X y acelerar el uso de la robótica quirúrgica y la guía por imagen. El seguimiento magnético utiliza campos magnéticos de baja frecuencia, similares a los que emplean dispositivos cotidianos como motores eléctricos y radios, para detectar con precisión la posición de diminutos sensores en el paciente. Sin embargo, los sensores existentes son complicados de fabricar, caros y extremadamente sensibles. Los resultados preliminares del nuevo sensor en chip, publicados en la revista "IEEE Transactions on Biomedical Circuits", muestran una precisión de seguimiento superior a un milímetro, lo que lo convierte en el sensor en chip más preciso hasta la fecha para navegar con instrumentos por el interior del cuerpo. El sensor se fabrica con tecnología de silicio estándar, lo que permite un proceso de fabricación bien controlado. Los chips de silicio son rentables a gran escala, por lo que la tecnología puede aplicarse por una fracción del coste de la tecnología de sensores médicos existente. Los chips de silicio también pueden conectarse fácilmente a las placas de circuito impreso flexibles más modernas, lo que permite un montaje rápido y fiable.
