El fuego es un riesgo importante para los sistemas técnicos. El uso creciente de accionamientos eléctricos es un problema especialmente explosivo. La empresa 4GENE, especializada en materiales glucosilados, ha desarrollado una solución biotecnológica para estos riesgos.
En ella, el olor artificial e intenso del humo se liga glucosídicamente en un proceso especial. El olor se libera en un momento determinado cuando se supera una temperatura crítica. Este olor de advertencia señala un incendio inminente mucho antes de que las llamas salgan del sistema. La empresa tecnológica denomina a este mecanismo "Sniff & Save", que se basa en una patente concedida y tres solicitudes de patente basadas en él.
