Bajo el título "La perspectiva industrial de la fabricación aditiva", la Conferencia sobre Fabricación Aditiva de Metales - MAMC convocó por quinta vez a un público internacional de expertos del 17 al 19 de octubre. Como en ocasiones anteriores, la atención se centró en el campo de la impresión 3D de componentes metálicos.
Aunque existen innumerables conferencias especializadas sobre el tema de la impresión 3D, la MAMC destaca por no centrarse en la impresión como tal, sino en las propiedades de los materiales impresos. Este enfoque especial también está garantizado por las numerosas universidades participantes, no sólo de Europa, sino este año en particular con una fuerte participación de Japón. Aunque la mayoría de los participantes procedían de la región DACH, un bloque separado de conferencias a cargo de ponentes británicos, por ejemplo, puso de relieve la orientación internacional del evento.
Bastian Bartel (AM Power) ofreció probablemente la mejor panorámica del estado de la tecnología y el desarrollo del sector en su presentación plenaria. Por un lado, el segmento no ha podido cumplir las expectativas fijadas hace unos años. Las previsiones económicas, apoyadas sobre todo por los fabricantes de sistemas, se han quedado muy por debajo de las previsiones.
Como muy bien dijo el Dr. Seidel (Pankl Racing Systems) en su presentación: Se acabó el bombo y platillo, ¡manos a la obra! Por otra parte, la proporción de productos industriales fabricados ha aumentado considerablemente, lo que significa que la industria está pasando de la producción de prototipos y piezas de prueba de I+D a la producción en serie, un paso vital para la pervivencia de la tecnología. Incluso las previsiones más recientes, que siguen siendo optimistas, se basan en datos procedentes de la producción industrial. Esto también se refleja en la tendencia hacia impresoras 3D cada vez más grandes. Además de los fabricantes europeos ya establecidos y sus competidores estadounidenses, cada vez son más los fabricantes asiáticos que entran en el mercado, por lo que cabe esperar una fuerte competencia predatoria en los próximos años (o temerla desde una perspectiva europea).
Un bloque aparte de presentaciones con ponentes de Japón mostró muy claramente que Asia reconoce la importancia de las tecnologías y está impulsando su ulterior desarrollo.
En las numerosas ponencias apenas hubo novedades materiales. En cambio, cada vez se conocen mejor los materiales existentes, sus propiedades y las relaciones entre los parámetros de impresión y las estructuras materiales resultantes. Se trata de un requisito esencial para su posterior aplicación industrial y, afortunadamente, los avances en este campo son significativos.
El postprocesado desempeñó un papel sorprendentemente secundario en esta conferencia. Mientras que las superficies externas ya no parecen plantear problemas gracias a la combinación de procesos mecánicos y electroquímicos, las estructuras complejas y las superficies internas siguen siendo un reto a veces imposible de resolver. Sin embargo, un estudio presentado en la conferencia y apoyado por la UE sobre el tema de las superficies internas concluye que sólo los procesos electroquímicos (galvánicos) como el electropulido pueden resolver este problema.