La Agencia Federal Alemana de Sustancias Químicas (BfC), en colaboración con la Agencia Federal de Medio Ambiente (UBA) y el Instituto Federal de Evaluación de Riesgos (BfR), presentó a la Agencia Europea de Sustancias y Preparados Químicos (ECHA) un expediente sobre la clasificación armonizada de peligrosidad del ácido trifluoroacético (TFA).
El TFA pertenece al grupo de sustancias químicas per- y polifluoradas (PFAS) y está clasificado como tóxico para la reproducción y como muy persistente y muy móvil debido a sus propiedades. En concreto, Alemania propone la clasificación como "tóxico para la reproducción, categoría 1B" con la indicación de peligro H360Df ("Puede dañar al feto, probablemente perjudicial para la fertilidad") y como sustancia vPvM con la indicación EUH451 ("Puede provocar una contaminación muy duradera y difusa de los recursos hídricos").
Las sustancias con propiedades vPvM son difíciles de descomponer en el medio ambiente y difícilmente se unen a los sedimentos o a los filtros de carbón activado. El tratamiento del agua potable sólo puede eliminar tales sustancias con un gran coste técnico. El TFA se detecta cada vez más en las aguas alemanas desde hace años y se produce como producto de degradación de pesticidas y refrigerantes fluorados como el R1234yf, entre otros. A pesar de la categorización, según el Instituto Federal de Evaluación de Riesgos, actualmente no existe ningún riesgo agudo para la salud de la población, ya que las concentraciones ambientales están muy por debajo de los niveles nocivos en pruebas con animales. No obstante, la nueva evaluación de riesgos sirve de base para otras medidas destinadas a reducir la contaminación ambiental a largo plazo, por ejemplo mediante autorizaciones más estrictas de las sustancias que forman los AGT.
El expediente publicado puede ser objeto de comentarios en un plazo de seis semanas. A continuación, el Comité Científico de Evaluación de Riesgos (CCR) de la ECHA debatirá el expediente de las autoridades alemanas y los comentarios recibidos. En un plazo de 18 meses, el dictamen del CCR se presentará a la Comisión Europea, que preparará el correspondiente proyecto de reglamento para adaptar el Reglamento CLP (Reglamento de adaptación al progreso técnico, ATP).
https://echa.europa.eu/harmonised-classification-and-labelling-consultation